¿Qué es la enfermedad de Alzheimer?

Inauguramos una nueva categoría en nuestro Blog que dedicaremos a la Enfermedad de Alzheimer. Con este Post introductorio queremos explicaros de una forma sencilla en qué consiste esta enfermedad, así como el modelo de intervención que llevamos a cabo desde Gerosol Asistencia tanto con el enfermo como con su familia.

La Enfermedad de Alzheimer es una enfermedad neurodegenerativa que presenta deterioro cognitivo y trastornos conductuales. Es una enfermedad irreversible y progresiva que destruye lentamente la memoria y las aptitudes del pensamiento, así como la capacidad de realizar las tareas más simples. En la mayoría de los casos, las personas que se han visto afectados por ella son mayores de 60 años. El deterioro se produce por la disminución en el cerebro de la acetilcolina, una sustancia química esencial en la realización procesos cognitivos como el aprendizaje, el pensamiento y la memoria.

Como ya hemos comentado, se trata de una enfermedad progresiva que puede durar años, a lo largo de la cual se distinguen tres fases:

Fase I: El paciente todavía puede razonar y realizar tareas, aunque presenta olvidos y desorientación en su día a día. Es frecuente que olvide lo que acaba de ocurrir o lo que acaba de decir. También disminuye la concentración y el interés por las cosas, manifestándose una tendencia hacia el aislamiento.

Fase II: Se presentan problemas para la realización de las tareas cotidianas, así como  desorientación espaciotemporal y disminución de la memoria. Comienza a sufrir caídas, se fatiga y muestra agresividad. En esta fase, el paciente encuentra dificultades para comprender instrucciones fáciles, puede esconder cosas o acusar a los demás, e incluso puede llegar a no reconocerse en el espejo o a tener dificultades comer por sí mismo.

Fase III: Empieza a no reconocer a sus seres queridos y conocidos, sufre pérdidas de memoria, no comprende las explicaciones y no controla esfínteres. Paulatinamente se va desconectando del entorno que le rodea. Posteriormente, es frecuente que necesite una sonda para alimentarse ya que no puede ingerir alimentos ni líquidos ni sólidos. En esta fase es cuando suele producirse el fallecimiento.

En la actualidad, no existe tratamiento, pero es posible paliar los síntomas, mejorando así la calidad de vida de la persona y de sus familiares.

Los cambios experimentados por el paciente derivados de la evolución de la propia enfermedad, requieren una atención individualizada y adaptada a la persona y a las diferentes situaciones que se vayan presentando. De igual modo, debemos tener en cuenta que, tanto el enfermo como sus familiares precisan una atención diferente en cada etapa.

Desde Gerosol Asistencia creemos que, junto a un tratamiento farmacológico, debe desarrollarse una intervención psicosocial, enmarcada en un contexto profesional sociosanitario. Trabajamos con el enfermo combinando una atención asistencial con una intervención rehabilitadora tanto a nivel cognitivo como motor. Todo ello sin olvidar a los cuidadores principales, muchos de ellos familiares del paciente, a los que prestamos una atención integral, apoyándoles y acompañándoles a lo largo de todo el proceso.