¡Ojo con las alergias en Navidad!

Cenas y comidas es la tónica común estos días de Navidad pero debemos tener especial cuidado sobre todo con las personas más sensibles estos días. La Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC) alerta de que el cambio de hábitos dificultan el control de alérgenos ocultos en los alimentos y pueden aumentar el riesgo de sufrir reacciones alérgicas. Siete de cada diez reacciones alérgicas graves ocurren cuando se come fuera de casa, algo muy frecuente estos días, advierte la sociedad médica, debido a la introducción en la dieta de productos altamente alergénicos (huevo, leche, frutos secos, marisco, etc.) típicos de esta época.

En Navidad es más fácil que puedan surgir alergias
En Navidad es más fácil que puedan surgir alergias

Los alergólogos recuerdan que los síntomas de una reacción alérgica aparecen en las dos horas siguientes a la ingestión del alimento y que la gravedad varía en función de la cantidad de alérgeno ingerido, sensibilidad de la persona, y factores externos como el asma, el ejercicio físico o el consumo de analgésicos o alcohol. Aunque suelen ser leves, las reacciones a alimentos causan entre el 10 y el 50 por ciento de las anafilaxias tratadas en Urgencias, por eso es recomendable que las personas que conozcan su patología deben acordarse de llevar consigo un autoinyector de adrenalina.

En el caso de contar con un alérgico a alimentos en casa debemos tener cuidado al hacer la compra y leer atentamente los etiquetados. En ocasiones, los alérgenos pueden ocultarse en preparaciones típicas de la Navidad. El problema es que en esta época del año debutan muchos alérgicos.

Desde SEAIC advierten también de las consecuencias que los árboles de Navidad pueden acarrear a personas con alergia al polvo, los ácaros o el moho; los árboles naturales pueden acumular polvo, mientras que los naturales podrían desencadenar alergia al moho. Y el resto de la decoración tampoco está exenta de riesgo. Por ello, para evitar la sensibilidad al polvo que acumulan los trasteros los expertos aconsejan guardar los adornos en envases de plástico que se puedan limpiar con facilidad.

También debe vigilarse el cumplimiento de los tratamientos en los pacientes con alergias respiratorias. Esta patología no es exclusiva de los meses de primavera y verano. Por ejemplo, los pólenes de las arizónicas o cupresáceas comienzan su polinización en el mes de diciembre y alcanzan sus máximas concentraciones en enero y febrero. Las temperaturas relativamente cálidas para la época del año podrían propiciar una mayor polinización de las cupresáceas. Por otro lado, se incrementa la exposición a sustancias irritantes como el tabaco, y el frío también representa un factor agravante del asma.

Las fiestas y los días de vacaciones nos hacen romper con la rutina y los horarios se ven alterados. Los expertos han observado que estos días los casos de agudizaciones de asma o rinitis se deben a un mal cumplimiento en la realización de los tratamientos, algo que favorece la aparición de crisis. En este sentido, la SEAIC recuerda a los pacientes alérgicos que no deben modificar las pautas de tratamiento acordadas con su médico y que deben llevar su medicación cuando salgan de casa o de viaje. En el caso de personas con alergias alimentarias conocidas, especialmente si cursan con anafilaxia, es imprescindible llevar siempre consigo el autoinyector de adrenalina, sobre todo si se realizan comidas fuera de casa.

Por lo tanto Gerosol Asistencia, que vela por el bienestar de todas las personas, os deja unas recomendaciones que os pueden ser de mucha utilidad:

1. Extremar la precaución. Los pacientes alérgicos a alimentos deben extremar la precaución durante las fiestas navideñas. Los casos de reacciones alérgicas suelen aumentar durante la Navidad debido al mayor consumo de alimentos altamente alergénicos, así como al inicio en el consumo de ciertos productos. Frutos secos, marisco, pescado o algunas frutas son los que con mayor frecuencia se relacionan con reacciones alérgicas en estas fiestas.  Conclusión: si no sabemos lo que comemos… mejor no comerlo. Además, las personas alérgicas deben llevar un “kit” de medicación adicional y aquéllas con diagnóstico de anafilaxia, en cuyos casos puede producirse una reacción alérgica más grave, es fundamental que dispongan de una inyección intramuscular de adrenalina.

2. Debe mirarse con más atención el etiquetado. Es muy importante saber que pueden existir «alimentos ocultos», es decir fuentes de alérgenos frente a los cuales se es alérgico y que pueden pasar inadvertidos al estar enmascarados o no contemplados en la etiqueta, sobre todo en los platos preparados.

3. Recetas alternativas. Las asociaciones de pacientes ofrecen en sus páginas web recetas alternativas a los dulces navideños sin huevo ni leche por ejemplo.

4. Cuidado con los cambios. Los cambios de hábitos y horarios en estos días disminuyen la correcta realización de los tratamientos, favoreciendo las crisis de alergias respiratorias como rinitis y asma bronquial.

5. Malos humos. La exposición a humos o irritantes como el frío pueden aumentar los síntomas en las alergias respiratorias. Toma precauciones.