Primer parque acuático inclusivo

A todos los niños les encanta zambullirse en el agua, que los empape una enorme ola o que sientan cómo les cae un cubo de agua. Por eso una de las mejores maneras de combatir este calor es, sin duda, ir a un parque acuático. Lamentablemente, la mayoría de ellos apenas tiene en cuenta la accesibilidad para personas con movilidad reducida o algún tipo de discapacidad.

Una iniciativa hacia el cambio.

Hace un año se inauguró en San Antonio (Texas), el primer parque acuático pensado especialmente para personas discapacitadas. Se llama Morgan’s Inspiration Island (la isla de la inspiración de Morgan) y es totalmente accesible en silla de ruedas.

El parque está decorado con una temática eminentemente tropical. Cuenta con 6 atracciones principales que han sido diseñadas teniendo en cuenta un amplio espectro de grados de movilidad. También incluye varias piscinas con fuentes, chorros de agua y demás elementos interactivos.

El creador de dicho parque es el empresario Gordon Hartman, según sus palabras: “Nuestro objetivo es proporcionar una gran experiencia para nuestros huéspedes en un ambiente de inclusión, seguro, cómodo y sin aglomeración de gente”.

Tiene a disposición de los usuarios unas sillas de ruedas especialmente diseñadas por la Universidad de Pittsburgh. Las han llamado PneuChair y funcionan con un motor de aire comprimido. De este modo han conseguido que sean mucho más ligeras (36 kg).

Además, la entrada es gratuita para personas con discapacidad, e incluso se alquilan gratuitamente sillas de ruedas especialmente creadas para utilizarse en el agua y evitar así estropear las de los propios usuarios.

Una de las características más curiosas de Morgan’s Inspiration Island es que tiene la capacidad de cambiar la temperatura del agua rápidamente para adaptarse a personas con especial sensibilidad al frío. Del mismo modo hay algunas zonas privadas que pueden ser disfrutadas por personas que se sientan abrumadas por demasiados ruidos o multitudes. Aun así, el parque en general está pensado para que sea bastante tranquilo.

El agua de sus piscinas es filtrada constantemente. De este modo aseguran que la calidad del agua es siempre la óptima sea cual sea la situación.

Otro elemento interesante son unas pulseras electrónicas impermeables que sirven para tener localizados a los usuarios en todo momento. El objetivo principal de estas pulseras es que ningún niño se pierda y sus padres puedan encontrarlo rápidamente

Morgan’s Inspiration Island forma parte de un complejo aún mayor llamado Morgan’s Wonderland (El país de las maravillas de Morgan). Este parque temático ocupa unos 100 Km² y también dispone de todo tipo de servicios adaptados a todo el mundo. Fue abierto en 2010 y tuvo tal aceptación que es el motivo por el cual se creó el parque acuático.

El desarrollo de una gran idea.

Todo el complejo ha sido diseñado por Gordon Hartman, su hija discapacitada de 23 años, Morgan Hartman y una serie de asesores, médicos, terapeutas, ingenieros, maestros de educación especial, cuidadores y el apoyo de diversas asociaciones de lucha por los derechos y la igualdad de gente con discapacidad.

El punto de inflexión se produjo en 2005, cuando Gordon observó que Morgan quería jugar con otros niños, estaba de vacaciones en una piscina del hotel, pero los niños estaban recelosos de Morgan y no querían interactuar con ella.

En ese mismo momento, Gordon acordó la creación de oportunidades y lugares en los que las personas con y sin discapacidad pueden unirse no sólo por diversión, sino también para una mejor comprensión el uno del otro.

Aunque este parque ha nacido con la eminente intención de ser accesible a gente con necesidades especiales, se niega a ser solo eso. Morgan’s Inspiration Island ha sido creado con la vocación y el propósito de ser un parque de inclusión. De este modo su accesibilidad permite que cualquier persona, con discapacidad o sin ella, puedan jugar y pasar un buen día unos al lado de otros.

Por el momento este es el único parque totalmente adaptado a cualquier tipo de persona. Esperemos que el ejemplo de la familia Hartman cunda y pronto veamos este tipo de instalaciones por todo el mundo.