En el trato a la persona mayor es crucial un buen proceso comunicativo para así poder establecer una adecuada relación terapéutica. Por eso, quiero darte algunas estrategias para lograr comunicaciones más efectivas con este colectivo.
A veces, cuando las personas mayores están acompañadas por su familiar hacen menos comentarios, muestran menos sus opiniones, miedos e inseguridades, reaccionando menos ante los temas tratados, llegando incluso a excluirse completamente de la conversación. La comunicación no debería suponer ningún problema adicional por ser una persona mayor. No obstante, la sociedad ha evolucionado en las últimas décadas, y los cambios culturales y sociales han provocado que los mayores sientan una pérdida de rol social. A esto hay que añadir que la vejez trae consigo cambios en sus capacidades físicas, cognitivas y emocionales.
No creas que el proceso de comunicación se basa únicamente en la transferencia de información entre la persona mayor y el/la profesional, pues esto puede suponer una pérdida de efectividad del mensaje. Por ello, es necesario establecer la escucha activa, la comunicación asertiva y una correcta comunicación no verbal. Ten en cuenta el contenido de lo que dice el mayor, el cómo se siente respecto a ese contenido y en consecuencia qué es lo que demanda.
En Gerosol sabemos que a la hora de buscar asistencia domiciliaria la persona mayor espera algo más que el cuidado que necesita a su edad o por su patología. Busca acogimiento y establecer vínculos emocionales con el personal, siendo muy importante crear una buena comunicación entre ambos. Así, el mayor se sentirá satisfecho, se implicará en el cuidado médico, y como consecuencia, los resultados de salud se incrementarán.
Consejos para tratar correctamente a una persona mayor.
- Ser tratado como cualquier persona, sintiéndose respetado, sin haber diferencia de trato por su edad. No debes tratarlo como un niño/a, aunque este en situación de dependencia. Tampoco emplees un lenguaje infantil ni paternalista, ni hacer menciones como “son como niños”.
- Ser tratado con afecto, comprensión y teniendo en cuenta sus opiniones y emociones a la hora de tomar decisiones.
- Cuando hables con una persona mayor es recomendable emplear formas gramaticales de respeto y cortesía como el Vd./Vds. Don/Doña, Sr./Sra, y si la persona mayor lo desea puedes tratarla de tú.
- También hay que considerar las posibles limitaciones visuales, auditivas, de movilidad y de comprensión. Usar apoyos visuales, como las clásicas listas en la nevera o los post-it con recordatorios, te será muy útil en estos casos.
- No atribuir todos sus males a la edad o a que son quejicas. Tampoco hacerle sentir como una carga por el hecho de que tenga problemas de salud.
- Dar información de manera clara y detallada. Al dialogar con una persona mayor simplifica el mensaje y facilita su comprensión. Ayuda el uso de preguntas directas, por ejemplo, “¿Quieres comer pescado?” en vez de “¿Qué quieres comer?”
Aunque la palabra sea nuestro principal instrumento de comunicación, el lenguaje no verbal es igualmente importante en este intercambio de información. A la hora de hablar con una persona mayor, asegúrate de hacerlo cara a cara, mirándole a los ojos, ya que leer los labios representa una ayuda importante para muchos mayores con problemas auditivos. Además, comprueba que hablas de forma clara, vocalizando correctamente y con un volumen y una velocidad adecuada.
En Gerosol los profesionales con los que contamos tienen control emocional para asistir a todas aquellas personas que precisen de ayuda especializada. Son personas comprensivas, con buena facilidad verbal y comunicativa, atentas, amables, empáticas y asertivas.
Creo que la comunicación existe cuando hay interés por entenderse.