Desajustes de tiroides: hormona que está mejor dormida

¿Para qué sirve exactamente la tiroides? Es una pregunta que quien más o quien menos se ha hecho alguna vez. Hemos oído hablar de problemas de salud relacionados con esta glándula, pero no tenemos muy clara su función ni los desórdenes que causa cuando no funciona como debería. En Gerosol nos importa que todas las personas tengan unos cuidados profesionalizados para mejorar su calidad de vida y a través de este articulo te acercamos a las patologías tiroideas.

Una glándula de gran implicación en el metabolismo

Pero ¿Cómo es la tiroides? Su anatomía tiene forma de mariposa, de color gris rosada, y tiene dos partes o lóbulos unidos por el istmo que se apoya en la tráquea justo por debajo de la laringe. Los lóbulos rodean la tráquea lateralmente situándose entre el esófago y las arterias carótidas. La glándula tiroides pesa aproximadamente 30 gramos y cuando es de tamaño normal no es palpable a través de la piel. Su función principal es producir dos hormonas específicas: la tiroxina o T4 y la tironina o T3, necesarias para el correcto desarrollo de numerosos procesos vitales, desde el control de nuestra temperatura o de nuestro metabolismo, hasta el buen funcionamiento del cerebro. Esta hormona se transporta por la sangre y va a todas las células que componen el organismo donde realiza sus funciones.

Para un correcto funcionamiento, la tiroides necesita un “ingrediente” esencial, el yodo, un mineral que nuestro organismo no es capaz de producir, por lo que, necesita obtenerlo a través de los alimentos. Los que más yodo pueden aportarnos son aquellos de origen marino, especialmente las algas y también mariscos y pescados. En general, una dieta variada y equilibrada proporciona al cuerpo todo el yodo que necesita y antes de recurrir a algún tipo de suplemento, como la popular sal yodada, es conveniente consultar con el médico para no caer en una ingesta excesiva de este mineral.

¿Qué desajustes puede tener y cómo se tratan?

Sin embargo, en la tiroides pueden ocurrir diversas alteraciones, y de hecho cerca del 12% de la población experimentará una función tiroidea anormal en algún momento de su vida. Os contamos brevemente los desajustes más comunes:

Hipotiroidismo. Se produce cuando la glándula tiroides produce menos hormona de la necesaria para el buen funcionamiento del organismo. Es una enfermedad muy frecuente sobre todo en mujeres de mediana edad y tras el parto. Los síntomas más importantes son cansancio, dificultades para concentrarse, frío y, a veces, aumento de peso. Cabe destacar que muchas otras enfermedades pueden dar síntomas parecidos, es por ello que para diagnosticar esta enfermedad hay que hacer una sencilla prueba de sangre.

Hipertiroidismo. Por el contrario, en este caso la glándula tiroides produce un exceso de hormona tiroidea. Es menos frecuente que el hipotiroidismo y se caracteriza por: sudoración, taquicardia, cansancio y a veces pérdida de peso. Se trata con una medicación específica durante varios meses y luego se retira para ver si la enfermedad se ha resuelto. En caso de que no se haya resuelto hay otras formas de tratamiento como la administración de yodo radioactivo.

 

La tercera enfermedad tiroidea es el bocio, que hace referencia a un agrandamiento en el tamaño de la glándula, en ocasiones por hipo o hipertiroidismo, pero en otras por causas no conocidas. También la tiroides puede verse afectada por la aparición de nódulos (bultos) o tumores, benignos en el 95% de los casos según datos de la Asociación Española Contra el Cáncer.

Como vimos anteriormente, la mayoría de las patologías del tiroides tienen tratamiento médico, sin embargo, en algunos casos el tratamiento no funciona y se hace necesaria una operación de tiroides, en concreto la extirpación. Las patologías que suelen requerir de cirugía de tiroides son: algunos casos de nódulo tiroideo, los bocios multinodulares de gran tamaño, el hipertiroidismo y el cáncer de tiroides.

En Gerosol Asistencia, contamos con todo un conjunto de profesionales, auxiliares y terapeutas especializados en el cuidado de personas mayores. También, gracias al equipo de trabajo social, apoyamos a las familias en cada situación. Si deseas conocer más sobre nuestros servicios, puedes consultarnos sin compromiso a través de la página web.

En la actualidad creemos que es normal sentirse cansado, irritable o dormir mal. Éstas y otras molestias pensamos que son producto de la agitada vida, la mala alimentación o el estrés. Pero estos síntomas pudieran ser consecuencia de un problema de salud debido a una disfunción tiroidea. Por ello, resulta importante, que aprendamos a interpretar el lenguaje de nuestro cuerpo cuando nos “habla”.