Propuestas en la gestión del patrimonio de nuestros mayores

Hace años que el sistema de pensiones en España y en Europa está en boca de todos. Se trata de un tema de gran relevancia social, económica y política. El progresivo envejecimiento de la población, y la cuantía cada vez mayor de las pensiones y de pensionistas, hace que muchos nos planteemos si el sistema de pensiones se podrá sustentar por sí solo en el futuro.

Para que las personas mayores puedan acceder y disfrutar de los mejores servicios asistenciales, como podrían ser los servicios de atención domiciliaria que Gerosol Asistencia presta, entre otros, residencia geriátrica, centro de día, necesitan contar con los suficientes recursos económicos, para ello, ya que en la mayoría de los casos las ayudas del sector público son insuficientes y/o tardías. Algunas entidades financieras han puesto en el mercado productos que pueden ayudar a resolver el problema económico en la tercera edad. Os hacemos un detalle de ellas:

La renta vitalicia concede al propietario de un inmueble, mayor de 65 años, la posibilidad de obtener ingresos extras para complementar su pensión, a cambio de transmitir la nuda propiedad (el derecho que se tiene sobre ese bien) reservando para sí, el usufructo vitalicio, con la ventaja añadida de dejar de pagar el IBI, las derramas extraordinarias de la vivienda y el seguro del continente de la casa, ya que con las Rentas Vitalicias Inmobiliarias sólo tendrá que pagar los gastos que están vinculados al uso de la casa (cuota ordinaria de comunidad, suministros de la vivienda y tasa de basuras).

 

 

 

 

 

 

Otra ventaja en este tipo de operaciones es que en su firma, no tendrá que asumir ningún gasto en el momento de la contratación, pues todos los gastos, honorarios profesionales e impuestos en las rentas vitalicias son a cargo del comprador de la nuda propiedad. Esta opción no admite cancelación, excepción hecha cuando el comprador deje de pagar la renta mensual. En ese caso, el titular puede ejercer el derecho de anular la operación, sin tener que devolver los importes percibidos; así se hace constar en la escritura pública firmada e inscrita en el Registro de la Propiedad.

Por otro lado, la hipoteca inversa es un producto financiero, diseñado para propietarios de un inmueble que permite convertir a dinero el valor patrimonial que representa la propiedad de su vivienda, sin perder la titularidad de la misma.

Es, por tanto, un préstamo o crédito hipotecario que permite al cliente disponer de parte del valor de su vivienda utilizando ésta como garantía

El importe  depende de la edad del prestatario, de las tasas de interés y del precio de la vivienda. No tiene cuotas de amortización, es decir, no hay que devolverlo mes a mes, sino únicamente tras el fallecimiento, la familia dispondrá del plazo de un año para la devolución.

A nivel fiscal, las cantidades que se reciben no tienen la consideración de renta, pues se trata de una disposición de un crédito, por tanto no tributan.

 

 

 

 

 

 

Así pues, a modo de resumen, podemos decir que hay al menos, dos productos estrella financieros que permiten a las personas mayores de 65 años obtener recursos económicos:

– La renta vitalicia inmobiliaria: Permite obtener una renta garantizada de por vida, transmitiendo la nuda propiedad pero sin perder el usufructo vitalicio de su vivienda.

– La hipoteca inversa: Permite obtener una renta vitalicia, temporal o un pago único sin perder la propiedad de su vivienda.

El único objetivo de estas soluciones, es que las personas mayores, lleguen a una jubilación digna, disfrutando tanto de su vivienda como de esas experiencias y vivencias que aporta el envejecimiento activo, manteniendo el bienestar de sus economías.

Gerosol Asistencia colabora con dos entidades como son Optima Mayores y Grupo Retiro que pueden ofrecer a sus clientes este tipo de operaciones.